¿Eres un micro-manager?


¿Micro qué? ¿Acaso soy pequeño?
A parte de la broma tonta y sencilla (¡pido disculpas!) 
¿Sabemos qué es un micro-manager y micro-management?

Una definición de micro-management es la siguiente:
"Forma de dirigir ejerciendo control excesivo sobre los miembros de un equipo, prestando excesiva atención a los detalles del trabajo que realizan."
Vamos que consiste en observar al detalle y hacer un control exhaustivo de cada actividad del colaborador. La confianza ese valor tan olvidado a veces.

¿Te suena? 
Es una práctica (no sé si habitual) que en mi caso la he sufrido.

Estar detrás del colaborador para supervisar (o controlar) cómo hace su trabajo y para decirle exactamente qué debe hacer en cada situación cuestionándole cualquier decisión, propuesta, iniciativa, ... hecha por miembros de su equipo, corrigiendo aspectos banales en la comunicación o en la redacción de "memorandums", informes, ... 

En definitiva que se preocupa demasiado por todo y convierte en una verdadera pesadilla para los miembros del equipo. 

Está claro que el método y el estilo de dirección no es el más adecuado; genera improductividad, malestar, tensión y seguramente convierte el ambiente en desmotivador e insatisfactorio, ¿verdad?

Seguramente esto suele ocurrir por un exceso de celo por estar orientados única y exclusivamente a los resultados sin tener en cuenta que los resultados los obtiene gracias a tu trabajo de dirección, facilitación del trabajo de tu "gente"

¿Eres un "micro-manager"? (seguro que no pero si lo sospechas...)
Pues si crees que lo eres estos son algunos consejos
  • Organiza  reuniones breves ("briefings", "sprint meetings", ...) Decide la periodicidad -aunque recomiendo semanal- para explicar claramente a tu equipo de trabajo el qué hay que conseguir (objetivos y metas) el por qué y para qué; es decir resultados, motivación y finalidad/utilidad. 
  • Acostúmbrate a no suponer y a especificar lo que esperas de ellos. Después te tendrás que acostumbrar a que ellos puedan decirte lo mismo. 
  • Diseña un plan de seguimiento, supervisión, control. Comprueba el progreso de las tareas siguiendo -por ejemplo el flujo natural de la actividad. (Pendiente, En curso, Con obstáculos, Finalizadas.) 
  • Escucha. Permite que aporten ideas, que comuniquen las dificultades, obstáculos, bloqueos que tienen para realizar alguna tarea o los recursos que necesitan para cumplir con los objetivos. Facilita los recursos y elimino (o reduce) los posibles obstáculos a los que se enfrentan tu colaboradores.
  • Apodera, delega. Propicia autonomía. Fomenta que el colaborador asuma su propia responsabilidad. Sus decisiones. Requerirá tener criterio e información. 

La caja de las habilidades

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