¿Qué es un Syllabus? Segunda parte: proceso y estructura


Seguimos con el concepto del Syllabus. Ahora toca el proceso de elaboración y su estructura.

¿Qué pasos se deben dar en la elaboración del syllabus?
  1. Decide que es lo que quieres que tus participantss sean capaces de hacer como consecuencia de la acción –propósitos y objetivos-
  2. Decide como va a ser evaluado, de forma adecuada, su trabajo 
  3. Identifica y desarrolla diferentes recursos; es decir, materiales, actividades, ejercicios, ...
  4. Estructura el trabajo activo de tus participantes en su aprendizaje 
  5. Redacta tu Syllabus
¿Cuál es la estructura del Syllabus?
 Podemos dividirla en las siguientes apartados:
  1. Información general
  2. Expectativas y objetivos
  3. Modo de evaluación
  4. Recursos y Calendario 
Información general
Aparte, de los datos formales, se suele incluir una breve introducción acerca de qué quiero que sepan los participantes de mí, ¿cuál es el interés del formador por la disciplina. 

Además se suele incluir información adicional referente a la existencia y participación de otros formadores, tutores o conferenciantes .

Y, finalmente, datos de contacto como por ejemplo teléfono, cuenta de correo-e, horario de tutoría, ...

Expectativas y objetivos
Es la combinación de información acerca de los requisitos previos al inicio del proceso de formación, lo que se espera del participante en la acción de formación, que expectativas le genera al formador esta acción formativa y los propósitos y objetivos de la acción en cuanto a:
  • ¿Qué es lo que los participantes sabrán y serán capaces de hacer después de haber realizado la acción; es decir los resultados previsibles?
  • ¿Qué actitudes, aptitudes, habilidades o conocimientos desarrollarán a lo largo del curso?
    Ni que decir tiene que es de suma Importancia de articular claramente los objetivos.

    • Para los formadores, articular claramente los objetivos de la acción de formación tiene dos ventajas: Primero, si sabes lo que esperas que tus asistentes consigan, será más fácil planificar el tiempo y cada una de sus sesiones. Segundo, al saber lo que esperas que tus asistentes aprendan, se hace más claro cómo evaluarles; qué tipos de pruebas utilizar y qué objetivos cumplen.
    • Para los participantes, pueden enfocar su aprendizaje, en el que son parte activa, a la consecución de estos objetivos (mayor motivación, mayor facilidad de conseguir éxito)
    Algunas sugerencias y comentarios.
    Su estructura puede consistir en cinco o seis párrafos en los que se explique a los alumnos cuáles son los propósitos y objetivos del curso. 
    • Propósitos: Afirmaciones amplias identificando los resultados generales del aprendizaje que esperas conseguir al final del curso.
    • Objetivos: Son las medidas concretas a través de las que realizar dichos propósitos, y suelen identificarse con relaciones entre conceptos específicos.
    En principio, podemos ser reacios a fijar los propósitos y objetivos principalmente porque pensamos que todos los objetivos tienen que ser “medibles” en una concreta cantidad (a la búsqueda de la pretendida objetividad)

    Sin embargo, esto no es así. Todos los objetivos no tienen por qué ser medibles cuantitativamente, y puede haber objetivos cualitativos, y ahí entra el juicio profesional del formador.
      En todo caso, la mejor estrategia es incorporar un abanico de objetivos cuantitativos y cualitativos, de forma, que, además, no se genere en el participante una actitud mecánica en el aprendizaje.

        Modo de evaluación.
        La razón más importante para establecer los objetivos del curso es que éstos determinan directamente los métodos de evaluación de los estudiantes.

        El único propósito de la evaluación es establecer en qué medida los estudiantes han alcanzado los objetivos pretendidos, y por tanto, los tiempos, el contenido y los métodos de evaluación deben determinarse de acuerdo con ellos.

        Por lo tanto hay que reflexionar e incluir las siguientes cuestiones:

        ¿Cómo se va a evaluar el trabajo del alumno? 
        ¿Qué tipos de pruebas reflejan mejor los objetivos del curso? 
        ¿Qué número de pruebas se van a realizar? 
        ¿En clase? ¿En clases teóricas? ¿En clases prácticas? ¿Fuera de Clase? ¿de trabajo en grupo? ¿individual?
         ¿Cuáles son sus funciones?
        ¿Transmitir información de retorno (feedback) al alumno (autoevaluación)? 
        ¿Con qué tiempos se les va a transmitir a los alumnos ese feedback? 
        ¿calificar? ¿Qué criterios de valoración se va a seguir en cada prueba?
        ¿Qué valor va a tener cada prueba en la nota final? 

        Está claro que no todas tienen por qué incluirse en una acción específica o en un programa de formación.

        También hay que reflexionar y comentar cuál será la estructura de las pruebas de evaluación

        • Existencia y número de las pruebas que se vayan a hacer a lo largo del curso, y su valor 
        • Existencia de una (única) prueba final y su valor sobre el conjunto de la nota final.
        • sobre el conjunto de la nota final, cuando se trate de evaluación para calificar.
        Y dependiendo de cada situación el formato de las pruebas que tengan que presentar los alumnos, haciendo referencia a las posibles penalizaciones por entrega tardía o no entrega.

        Recursos y Calendario.
        Una vez que hemos hecho el trabajo más duro de articular los propósitos y objetivos del curso, y la forma de evaluar su consecución, estamos en disposición de decidir qué recursos, en qué orden, y con qué método de aprendizaje nos ayudarán a agilizar la forma en que los estudiantes procuran conseguir estos objetivos.

        En cuanto a los recursos:
        1. ¿Cómo puedo mejorar el éxito de los estudiantes en el curso a través de los recursos? Facilitándoles los recursos (o lo que es lo mismo, el acceso a los mismos) 
        2. ¿Qué recursos están disponibles? ¿Manuales? ¿otras lecturas adicionales, obligatorias o recomendadas? ¿esquemas? ¿apuntes preparados? ¿bases de datos de preguntas para las pruebas calificatorias? ¿software? ¿equipo de laboratorio? 
        Manual de referencia (si existe), lecturas adicionales: Indicando si se trata de lecturas obligatorias o recomendadas y donde pueden encontrase (referencia bibliográfica o webográfica), dinámicas y casos de estudio, ...

        Y por lo que se refiere al calendario , en cada unidad o módulo de contenidos:

        • La modalidad ante la que nos encontramos (teórica/práctica, presencial/a distancia) y quien es el formador responsable.
        • Los puntos del programa que van a ser explicados en esa unidad o módulo
        • Las lecturas que van a tener que realizarse por el participante.
        • Los trabajos y ejercicios que van a tener que se entregados por el participante          
        • El tipo de pruebas que van a realizarse durante esa unidad o módulo.
        • La comunicación de las evaluaciones (si procede)
        Este syllabus es una adaptación a modelos reales de programas extensivo de formación universitaria extraídos de mi propia experiencia como estudiante en la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Barcelona (1990)

        Un encuentro, una solución

        Comentarios