A menudo me encuentro en acciones de formación en donde el asistente le es difícil o muy difícil establecer objetivos y metas; ya sean objetivos/metas personales, de equipo, ... Me sorprende.
Sobretodo me sorprende la capacidad que tenemos de crearnos todo un imaginario de conceptos (consultolabia) referentes a objetivos generales, objetivos estratégicos; por no decir de los tácticos y operativos (se suelen expresar así) lineas estratégicas, planes estratégicos (¡por supuesto!), ...
En definitiva la utilización de un lenguaje grandilocuente que en la mayoría de las veces no expresa nada o prácticamente nada y además es poco inteligible cuando se tienen que trasladar a los miembros de tu equipo.
Se suele ser impreciso, ineficaz, poco claro, a veces excesivamente retador (tanto que no se puede asumir), alejado de la realidad (de los miembros del equipo) y por supuesto lo suficientemente general que permita múltiples lecturas, no limitado en el tiempo para que no se pueda desplegar fácilmente un plan de acciones y finalmente que sea prácticamente imposible saber si se ha conseguido o no.
Ya no quiero destacar que se complemente con un incentivo por su consecución que en la práctica se esté pagando dos veces por lo mismo; es decir, el salario fijo por tu actividad que es conseguir determinados resultados y además un salario variable por haberlos conseguido.
Para poder corregir de alguna manera esta situación debemos hacer ejercicio; os presento algunos:
- Utiliza -a partir de ahora un lenguaje CCCP cuando inicies un proceso de fijación de objetivos. Es decir, sé claro, conciso, concreto y preciso.
- No que decir tiene que un objetivo es la expresión más concreto de una intención o deseo; por lo tanto acuérdate de que un objetivo tiene que ser de MARTE; medible, asumible, realista, acotado en el tiempo y específico. Por favor abandona la retórica de objetivos generales, planes estratégicos, y las ambigüedades propias de personas que solo se escuchan.
- Rodéate de un lenguaje productivo que te invite a concretar y medir. Por ejemplo hay una serie de palabras mágicas que te podrán ayudar. Son las siguientes: Aumentar, Reducir, Mantener, Crear, Eliminar. Te será más fácil concretar y pasar de una intención, deseo a la acción.
Son pocos los consejos que ofrezco pero desde mi punto de vista son efectivos.
Un encuentro, una solución
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